La educación y la sensibilización social son los dos pilares fundamentales para el fomento de la igualdad y contra la violencia de género. Esta es la principal idea que compartieron ayer cinco mujeres con poder -la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco; la rectora de la UJI, Eva Alcón; la subdelegada del Gobierno, Soledad Ten; la presidenta de la Cámara de Comercio, Lola Guillamón; y la directora del Puerto, Ana Ulloa-, que participaron en el debate enmarcado dentro del ciclo de los Desayunos del Casino organizado por esta institución de la ciudad. La mesa redonda estuvo moderada por Estela Bernad, que es vicepresidenta de AD Comunica.

Ante un aforo de casi un centenar de personas entre las que destacaron empresarios, políticos, representantes de colectivos sociales y de las fiestas, así como socias de Networking Directivas Castellón, las representantes de las diferentes instituciones participantes en esta propuesta defendieron la importancia de la igualdad. Marco dijo que «nadie es superior a nadie por su género y la equidad ha llegado a Castellón para no irse pese a que las mujeres aún llevamos sobre nuestras espaldas muchas responsabilidades familiares, además de nuestra trabajo diario. No hay que dar ni un paso atrás y trabajar por la conciliación laboral». En el mismo sentido se pronunció Eva Alcón, quien a pesar de reconocer los obstáculos de la mujer para ocupar ciertos puestos de dirección, sí que defendió la importancia para las féminas de «ser independientes económicamente, de pensamiento y de espíritu crítico porque, solo así, habrá igualdad entre hombres y mujeres».

Soledad Ten apostó por realizar políticas «que puedan compaginar la maternidad con los cargos de la vida pública». Por su parte, la empresaria Lola Guillamón defendió la educación «desde casa para potenciar la igualdad, con esfuerzo y tesón» y Ana Ulloa se mostró totalmente de acuerdo con esta línea de pensamiento con la educación como protagonista. Durante el acto, de alrededor de una hora y media de duración, también se puso sobre la mesa el debate sobre la conveniencia o no de que haya cuotas de mujeres en las instituciones y administraciones, así como las dificultades y obstáculos que se encontraron cada una de ellas para alcanzar puestos de relevancia. En ese sentido, tanto Marco como Alcón y Ten defendieron estas cuotas «con el fin de mitigar la desigualdad de género».

Guillamón se mostró partidaria de que estas deberían existir por valía y capacidad «puesto que no me gusta que solo por el hecho de ser mujer me coloquen en los sitios». Ulloa también apostó por esta última idea «porque la elección de un candidato «debe basarse en la capacidad y el mérito de cada una de las personas».

Las cinco participantes destacaron el talento, la preparación, el tesón y la dedicación que pueden aportar las mujeres con experiencia en los diferentes puestos de dirección en la provincia.