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Las municipales suelen reforzar a los partidos con una mayor implantación en el territorio y el pasado domingo no fue una excepción. El PP, que presentó listas en todos los pueblos de Castellón, mejoró notablemente el resultado obtenido respecto a las autonómicas y las generales del 28-A. Aun así, los populares quedaron lejos de la formación vencedora, unos socialistas que se disponen a dominar la mayor parte de las instituciones con más comodidad que hace cuatro años.

El PP, con 82.189 votos, recuperó prácticamente 20.000 sufragios con respecto al apoyo cosechado en el superdomingo electoral de hace apenas un mes, cuando compitió en las mismas condiciones que Ciudadanos y Vox, que en las locales solo presentaron listas en 42 y ocho municipios, respectivamente.

Evidentemente, esta menor presencia en el territorio les pasó factura en las urnas. Ciudadanos obtuvo 24.225 sufragios el pasado domingo, cuando el 28-A se acercó a los 51.000 en las generales y rozó los 47.000 en las autonómicas. En cuanto a Vox, en tan solo un mes se le esfumaron uno de cada tres apoyos y hace ahora una semana solo fue votado por 9.496 castellonenses. Aunque no llegaron a las diez listas, estas fueron presentadas en unos municipios que representan prácticamente dos tercios de los habitantes de la provincia, con lo que también cabe achacar su descenso a un cierto pinchazo después de que las grandes expectativas con las que se presentaba el 28-A no terminaran de cumplirse.

Tomando solo los datos de las autonómicas, estas dos formaciones perdieron un total de 45.681 apoyos, mientras que el PP solo recuperó 15.456, con lo que hubo alrededor de 30.000 ciudadanos que o bien optaron por la abstención o por otro partido fuera del bloque de las derechas. En el caso del PSOE, esa diferencia fue de apenas 10.000 votos.

CASI 20.000 VOTOS MÁS // En cuanto a los socialistas, su comportamiento electoral también mejoró por motivos como la recuperación de la marca PSOE y la inercia tras la victoria del 28-A o la potente estructura territorial, pues presentó listas en 129 localidades de Castellón. Los resultados, con 103.075 apoyos, fueron mejores que en la anterior cita con las urnas, en la que se quedaron en 85.584 (autonómicas) y 92.075 (generales). Hacía once años que el partido del puño y la rosa no superaba los 100.000 votantes en unas elecciones a nivel provincial, pues precisamente después de ganar las generales del 2008 con Zapatero comenzó una travesía del desierto que no les permitió acceder al poder institucional en Castellón hasta el 2015.

Los otros dos partidos a la izquierda se hundieron. Compromís, cuyo resultado en las autonómicas en Castellón le permitió aguantar el tipo con 44.748 apoyos, se dejó 15.000 papeletas en las municipales. Podem, que en las generales obtuvo 43.466 votos, perdió uno de cada cuatro apoyos y cayó a solo 11.476.