La voluntad de dar la máxima participación a la militancia dio paso en el 36º Congreso Federal del PSOE, aquel en el que Pedro Sánchez fue elegido como líder por segunda vez en dos años, a la aprobación de un reglamento para la confección de las candidaturas que ahora se enreda entre los pies de los alcaldables socialistas de Castellón porque, a priori, no garantiza que los candidatos puedan conformar sus equipos de confianza en las poblaciones de más de 20.000 habitantes.
SIN FILTROS // Ocurre, además, en un momento en el que --aunque con pactos en todos los casos salvo en Vila-real, donde gobierna con mayoría absoluta-- el PSPV ostenta la mayor parte de las alcaldías de las ciudades de mayor tamaño en la provincia. Se trata de una norma interna que no plantea filtros de ninguna naturaleza, ya que cualquier afiliado al corriente de pago de sus cuotas puede ser, si lo desea, candidato a concejal, sin tener que presentar ningún aval. Los afiliados votarán a quienes se presenten en listas abiertas y en cremallera desde la perspectiva de género.
Aunque aún hay más detalles que complican el proceso, que se pondrá en marcha si no hay más aplazamientos en la primera quincena de febrero, la principal preocupación de quienes afrontan el nuevo sistema --antes se presentaban a votación listas cerradas-- es la de encontrarse en la situación de encabezar una candidatura con nombres que no sean en absoluto de su confianza en los puestos de salida.
En este sentido, la alcaldesa de Castellón y candidata socialista a repetir en el cargo, apuntó ayer que «las candidatas y los candidatos a las alcaldías tienen derecho a formar sus equipos de gestión». Añadió que «el objetivo ha de ser el de conseguir la máxima cohesión y confianza entre quienes puedan conformar un gobierno y desarrollar las políticas municipales de forma coordinada y eficaz». De lo que se desprende que pide medidas correctoras. En una línea similar se pronunció también la primera edila y candidata de Almassora, Merche Galí.
aclaración federal // Ante la inquietud generada, el secretario federal de Organización, José Luis Ábalos, emitió ayer una instrucción en la que precisa que serán «oídos» los alcaldables antes de remitir las propuestas y que, en todo caso, los comités de listas de los órganos superiores tendrán la última palabra sobre las candidaturas como, en realidad, siempre ha ocurrido en el PSOE.
El alcalde de Vila-real, José Benlloch, quitó hierro a las dificultades que pueda causar este reglamento y afirmó estar «seguro» de que el partido «tendrá en cuenta la opinión de los alcaldables» y que habrá «sentido común».
