El Fòrum de la Nova Ruralitat, integrado por más de cien profesionales que viven en el mundo rural, ha presentado un manifiesto a Les Corts para que se reconozca la despoblación como un problema «urgente y transversal» de la Comunitat Valenciana.

Entre sus conclusiones señala que si se hubiera hecho el trazado de la autopista AP-7 por la zona central de Castellón, ahora apenas habría despoblación, la actividad económica estaría territorialmente mejor distribuida y el modelo turístico litoral sería, probablemente, de mayor calidad, y también el turismo de las distintas zonas de montaña.

Nova Ruralitat prevé fases para revertir la despoblación: el reconocimiento de responsabilidades institucionales, de la Generalitat valenciana y las diputaciones; la exposición pública de un plan de despliegue de servicios, infraestructuras y dotaciones; y la implicación de la ciudadanía.