El equipo de gobierno de Castelló envió ayer a los grupos de la oposición una nueva propuesta de sueldos, que mantiene las retribuciones de los concejales de gobierno con el incremento aproximado de un 50% y recupera las nóminas de la pasada legislatura y de los modelos anteriores del PP --con la actualización del IPC-- para la oposición, eliminando las dedicaciones exclusivas y el incremento de las parciales que recogía el primer documento que se elevó al pleno del jueves y fue retirado tras la dura intervención del PP durante la sesión.

Con esta nueva oferta, la principal damnificada es la portavoz del PP, Begoña Carrasco, que era la única que se había acogido en principio a la dedicación exclusiva. Ahora, pasa del 100% al 25% de dedicación, y con ello su retribución anual bruta de 39.277 euros a 28.806 euros. Para los portavoces de Ciudadanos (Alejandro Marín-Buck) y Vox (Luciano Ferrer), que habían rechazado la exclusiva y cobrarían por asistencias para poder compatibilizar el trabajo público con el privado, podría ser esta una mejor oferta que la anterior, al permitirles un 25% de dedicación.

Los portavoces adjuntos también bajarían la dedicación de un 75 a un 20%; y los ediles de la oposición del 40 al 20%.

Esta nueva propuesta se abordará en una comisión plenaria extraordinaria el lunes a las 9.00 horas, con la idea de convocar durante la semana un pleno extraordinario para aprobarla.

El portavoz del equipo de gobierno, Rafa Simó, explicó que «el PP rechazó el modelo de Fadrell del sistema de retribuciones y este gobierno lo que hace es volver a modelos anteriores».

«El PP cometió en el pleno un error histórico, porque la propuesta del Acord de Fadrell de régimen retributivo se diferenciaba respecto a otros modelos en que beneficiaba a la oposición y principalmente al portavoz y portavoz adjunto del PP y aun así mintieron en el pleno descaradamente», insistió el concejal Simó.