El puerto de Castellón lleva ya dos días cerrado debido al temporal marino que azota la provincia. Ayer se registraron olas de hasta tres metros de altura, por debajo de los cinco del jueves. A pesar de ello la virulencia del oleaje hizo imposible que los prácticos trabajasen, con lo que nueve barcos esperan todavía su momento para dejar los muelles provinciales, señalaron fuentes de la Autoridad Portuaria. Otros dos barcos que estaban fondeados salieron a mar abierto para capear el temporal.

En cuanto al sector pesquero, ayer ninguna de las naves de la provincia se hizo a la mar, con lo que las cinco lonjas de la provincia quedaron sin actividad, como confirmaron fuentes de la Federación Provincial de Cofradías.

En Benicarló, el temporal marítimo golpeó con fuerza la costa, especialmente la norte, agravando el grado de degradación y erosión de los acantilados. El mal estado de la mar también obligó a la flota pesquera a permanecer ayer viernes en el puerto, informa María José Sánchez.