El pleno del Consell ha aprobado este viernes el decreto de modificación del Plan Integral de Residuos de la Comunitat Valenciana (PIRCV), que desestima el desarrollo por parte de la Generalitat de infraestructuras de incineración en relación con los residuos domésticos y asimilables para apostar por la prevención en la generación, reducción en origen, preparación para la reutilización o el reciclado de calidad.

Según ha informado la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, con esta modificación se introducen "nuevos criterios para la gestión adecuada de residuos industriales y no se contempla, ni la incineración, ni tampoco la coincineración o valorización energética de residuos peligrosos de cualquier tipo susceptibles de tratamientos previos o alternativos".

El nuevo plan de residuos "abandona definitivamente la perspectiva de proyectos de macroplantas o macrovertederos en la Comunitat Valenciana", según el Consell.

Su revisión era necesaria tanto por lo prescrito en cuanto a plazos en la Ley estatal 22/2011 como por la adaptación al Plan Estatal Marco de Gestión de Residuos 2016-22 (PEMAR), así como por diversas sentencias del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) que anulaban el artículo 17.3 del anterior texto, según las mismas fuentes.