El 90% de desahucios que tenemos en Castellón es de okupas». Es el contundente dato aportado por la decana de los procuradores, Carmen Rubio, respecto a una problemática que en los años de la crisis económica acaparó la actualidad informativa por la gran cantidad de familias que se quedaron en la calle, y que ahora, pese a que sigue existiendo, se ha matizado gracias al trabajo de las administraciones, las plataformas ciudadanas y a una disposición de los bancos a dar más facilidades a los afectados.

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) dio a conocer ayer las cifras de lanzamientos por impago de alquiler o de hipoteca del cuarto trimestre del 2018, y por tanto de cierre de año. Entre ambas modalidades se superó el millar, aunque se registró un importante descenso respecto al ejercicio anterior, cuando sumaron más de 1.200. Unas cifras que se han estabilizado en los últimos años respecto a los primeros de la crisis económica.

VUELVEN A ENTRAR // En los procesos de desahucio que implican desalojar a personas de una vivienda, los procuradores son parte implicada, ya que su presencia es obligatoria. La máxima representante del colectivo en la provincia explica que ha habido un cambio de mentalidad que ha hecho que «se paren muchos procedimientos, no como antes». Ahora, lo que más atienden son casos en los que los okupas están implicados. «Pasa mucho en los pueblos, en casas que se han quedado vacías. Además, se les echa pero vuelven a entrar», detalla.

El abogado Fernando Falomir también habla de una clara mejora del panorama, y pone en valor «el cambio de postura de los bancos», hasta el punto de que ahora «son sobre todo los particulares propietarios de viviendas los que inician los procedimientos de desahucio». «Ha influido mucho la presión social, que ha dado lugar a una mayor permisividad. Ahora el banco, antes de desahuciarte, te ofrece pisos en alquiler a precios asequibles, y ya cuando tienes nuevo alojamiento, ejercita el lanzamiento», detalla.

Es muy habitual, coincide con Rubio, que los bancos «quieran hacer uso del parque de viviendas que tienen en estoc y cuando van a entrar, se la encuentren ocupada ilegalmente».

«Pero por fortuna no se registran tantas situaciones dramáticas como antes, en los años 2008, 2009 y 2010», destaca Falomir.

menos hipotecas // Toni Valls, portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Castellón, no es tan optimista en sus valoraciones, pese a que reconoce que se ha avanzado mucho en este terreno: «Lo que pasa es que la gente ya no pide tantas hipotecas, por eso han bajado los desahucios». «Las moratorias para el pago que se han establecido, como la ley Guindos, han ayudado, pero la última acaba en el 2020, por lo que toda la gente que se ha acogido a esta medida que en esa fecha no tenga todavía recursos económicos para pagar, será desahuciada», advierte.

Valls reconoce que en muchas ocasiones, en los lanzamientos tanto de alquiler como de hipoteca están implicados okupas, pero distingue entre dos tipos: «Si hay implicada una familia con niños está justificada. Pero luego hay mucho listo que se entera de que una vivienda se ha quedado vacía y la alquila ilegalmente»