La provincia de Castellón está en alerta debido a la ola de frío polar que entrará hoy y se quedará hasta el sábado provocando una bajada de las temperaturas mínimas de hasta los -5 grados en el interior y a 1 grado en el litoral. Las noches más frías serán las del viernes y el sábado y, por el día, el mercurio no pasará de los 4 grados en algunas localidades.

Por este motivo, diferentes administraciones como la Generalita Valenciana -a través de Emergencias- y la Diputación provincial, además de Cruz Roja, han activado sus respectivos dispositivos con el fin de resolver los episodios de heladas o atenciones sociales que se puedan producir con motivo de esta situación meteorológica de alerta.

La Diputación, por su parte, tiene preparada toda su flota, tanto en la capital como en Morella, formada por 190 efectivos humanos, 20 máquinas quitanieves, nueve vehículos salero, una unidad de maquinaria pesada y logística con cinco palas cargadoras y un tractor forestal con fresadora para la limpieza de los accesos más complicados, una moto de nieve y un vehículo de rescate. De hecho, ayer mismo, en la localidad morellana y en Portell ya se tuvo que tirar sal para evitar el hielo en la carretera, a pesar de que las temperaturas no fueron tan bajas como las que se esperan a partir de hoy.

Instar a los diferentes ayuntamientos y solicitar su colaboración para la puesta en marcha de los dispositivos de protección ante estas circunstancias es el principal objetivo de la campaña organizada por la Generalitat a través de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias.

Finalmente, los voluntarios de Cruz Roja recorrerán las calles de la capital por la noche ofreciendo ropa de abrigo y bebidas calientes a las personas que pernoctan en la vía pública y tiene preparado unas acciones especiales.

De momento, ayer las temperaturas mínimas subieron 8,7 grados en el interior con respecto al martes y los termómetros marcaron 18 grados en el litoral.