A escasas horas de que acabe esta tarde el plazo para pedir a la Mesa del Congreso la creación de grupos, Mònica Oltra se enrocaba y presionaba ayer para conseguir que Compromís --es la coportavoz-- y su coalición con Podemos consiga su aspiración de contar con uno propio, mientras los socialistas continuaron negando la opción, si bien suavizaron su postura y comenzaron a hablar de vías para dar voz a los nueve parlamentarios valencianos, entre los que se encuentra la castellonense Marta Sorlí.

La también vicepresidenta del Consell pidió al PSOE que ceda un diputado a Compromís-Podemos como ha hecho con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y aseguró que “la pelota está ahora en el tejado del PSOE y de Pedro Sánchez”, al que avisó de que “para hablar”, no hay que “maltratar” al interlocutor.

Oltra aseguró que confía en que la coalición valenciana pueda formar un grupo propio en el Congreso de los Diputados, pero lamentó que quien dice que quiere dialogar “empiece atropellando los derechos de aquel con quien quiere hablar”.

Su socio de gobierno, el secretario general del PSPV y presidente del Consell, Ximo Puig, mantuvo su postura ambigua al decir que, aunque el reglamento del Congreso lo impide, el PSPV cedería el diputado que pide Oltra, en la línea de sus manifestaciones de los últimos días en las que siempre comprende la aspiración de Compromís, pero recuerda sin excepción que no puede ser, al tiempo que pide una reforma urgente del reglamento de Congreso y Senado para evitar “situaciones anómalas” como esta.

Sánchez no se pronunció al respecto, pero sí lo hizo el portavoz socialista en el Congreso, Antonio Hernando quien aseguró que su partido está dispuesto a estudiar vías de solución para que las marcas afines a Podemos, Compromís, al catalana En Comú Podem y la gallega En Marea, tengan “voz propia” en la Cámara Baja.

En todo caso, consideró muy complicado que las plataformas puedan tener grupo propio, pero subrayó la voluntad del PSOE de intentar encontrar fórmulas que les puedan convenir. H