Apenas hay algunos nombres para el nuevo gobierno socialista --han pasado apenas tres días desde que Pedro Sánchez tomó posesión--, pero sí expectación en los mentideros políticos de los socialistas castellonenses, en los que fluyen ya desde la pasada semana nombres con los que podrían cubrirse los puestos de confianza que Madrid deberá elegir en la provincia, como el subdelegado de Moncloa en Castellón y su jefe de gabinete, amén de otros cargos como la dirección provincial de Costas, la de Agricultura o la Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (Muface).

Destino, la capital

Igualmente, abundan las quinielas sobre quiénes se irán a Madrid con un cargo bajo el brazo. Entre estos últimos, se daría ya por seguro que Susana Ros, exdiputada, actual asesora de la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco; secretaria para la Violencia de Género en la ejecutiva federal del PSOE y, sobre todo, principal interlocutora de Sánchez, con quien tiene línea directa, ocupará un cargo en el segundo escalón del Ministerio de Igualdad. Es determinante la estrecha relación personal de Ros con el líder del partido, para el que ha hecho campaña interna de forma activa.

Por otra parte, Artemi Rallo, diputado en el Congreso, tarea en la que logrado una notoriedad que se ha acentuado en los últimos meses con su papel en la comisión de investigación de la financiación ilegal del PP, es otro de los nombres sobre la mesa para ocupar un puesto en el segundo escalón, como ya lo hizo como director de la Agencia Estatal de Protección de Datos.

Opciones para subdelegado

En el caso del subdelegado, cuyo relevo podría producirse, según fuentes del partido, en apenas dos semanas y no en el plazo habitual de hasta mes y medio, solo pueden optar los funcionarios del grupo A, que ocupan, entre otras tareas, las de profesores de instituto y catedráticos.

En este capítulo, una de las posibilidades que se barajan es la de Miguel Ángel Guillén, quien ostenta un cargo en la Delegación del Consell en Castellón, y ya sonó para ocupar la Subdelegación en la primera legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero. Es también el marido de la alcaldesa Amparo Marco, circunstancia que, en algunos círculos, podría parecer un serio hándicap.

José Martí, quien ocupa una vicesecretaría (Preparem futur) en el PSPV provincial y es director del IES Penyagolosa, es otro de los nombres que forman parte de la quiniela. Se trata de uno de los hombres con peso en los equipos del anterior secretario provincial, Francesc Colomer; y del actual, Ernest Blanch.

Otra opción pasa por el médico Rafael Calvo, director del Hospital de La Magdalena y funcionario del Estado, que ya fue jefe de gabinete de Toni Lorenzo en la Subdelegación, quien a su vez lo fue, curiosamente, de José María Calles, antes de sucederle en el puesto. Lorenzo se descartaría para repetir y dejar Ayuntamiento y Diputación a un año de elecciones. Un nombre más en solfa entre los socialistas sería el de Juan Miguel Salvador, también de la ejecutiva de Blanch, y significado sanchista en los procesos internos, aunque su condición de profesor en un centro de Formación Profesional, le dejaría fuera porque no cumpliría los requisitos ténicos.

En la Comunitat

El puesto de delegada del Gobierno podría ser para Mercedes Caballero, mientras que la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, negó ayer que vaya a formar parte del Gobierno, en tanto que se atribuye a la responsable de Sanidad, Carmen Montón una posible cartera.