Es habitual perder o al menos intentar perder esos kilitos de más antes del verano para lucir tipazo en la playa durante las vacaciones. En el caso de Carlos Latre, el frenético ritmo de vida del polifacético showman le ha llevado a la operación inversa: aprovechar estos meses estivales para ponerse en forma. Y como castellonense que es lo está haciendo en su tierra, y en concreto en las instalaciones del colegio Agora Lledó, donde entrena a diario bajo las órdenes de Bernardo Casterá.

«Llevamos ocho veranos trabajando juntos y es un alumno muy aplicado. Este verano ha intensificado su entrenamiento, pues tiene el objetivo de estar más en forma que nunca por salud y para ofrecer lo mejor de él en cada espectáculo», confiesa Bernardo, siete veces campeón de España de natación y profesor en Lledó desde el 2011. «En una semana ya ha perdido más de dos kilos y con esta marcha acabará el mes a un nivel impresionante. Entrenamos de lunes a viernes y tres días en doble sesión, así que los resultados no han tardado en llegar», añade.

Pese a que es en verano cuando Latre intensifica su puesta a punto, Bernardo asegura que durante el año controla también el estado físico del humorista junto a varios compañeros: «Como viaja mucho, en Madrid tiene a Iñaki García y en Barcelona a Leti Pelegrín, con los que formamos un equipo para seguir toda su evolución».

Este entrenador personal y coach afincado en Castelló incide en que en el caso del presentador, «su principal problema es la rutina laboral que lleva, lo que no le permite alimentarse de la mejor forma porque come mucho fuera de casa. Ahora que tiene más tiempo hemos preparado una dieta con alimentos reales; es decir, nada de prefabricados o bollería industrial, sino pescados, legumbres, verduras y carnes hechas en casa», afirma Bernardo, que incide en que «la parte mental es la más importante».

Una cuestión de actitud

Inmerso en el mundo del deporte de alto rendimiento desde casi la infancia, el entrenador de Latre destaca que «para conseguir los objetivos no puedes ir con medias tintas. Carlos se lo está tomando muy en serio y al margen de todo lo que entrenamos, también se cuida cuando sale a comer con amigos y es consciente de la importancia de los ejercicios no programados como por ejemplo ir andando cuando se pueda en vez de coger el coche, subir las escaleras y no el ascensor, o dar una vuelta en bicicleta los fines de semana. En resumen, ser activo y no llevar una vida sedentaria».

Sobre el trabajo en el gimnasio, Bernardo asegura que su pupilo «combina trabajos de fuerza con cardio. Vamos a la piscina, hacemos pesas... hay que equilibrar». También tiene palabras Bernardo para el Latre persona: «Hace las sesiones muy divertidas. Igual se pone a cantar que cuenta un chiste. En las distancias cortas no parece una estrella; es muy normal».