Los grupos de la oposición del Ayuntamiento de Castellón -PP, Castelló en Moviment y Ciudadanos- se unieron a favor de una moción presentada por el grupo popular, y enmendada por CSeM, en la que reclaman al equipo de gobierno (PSPV y Compromís) que subsane «las deficiencias del barrio de Maestría denunciadas por la asociación de vecinos».

Unas deficiencias que, según el concejal de Ordenación del Territorio y Movilidad, Rafa Simó, «son falsas». «Este gobierno hace caso de los técnicos. Respeten el trabajo de los funcionarios», espetó, visiblemente molesto. «¿Quién nos ha tomado el pelo? El proyecto de la supermanzana de Maestría está avalado por un informe técnico», replicó Simó, después de que desde CSeM y Cs calificaran como tomadura de pelo los trabajos de remodelación del barrio, que han tenido un coste de 1,5 millones y han terminado recientemente.

«Se han hecho imbornales, el cableado aéreo compete a las compañías suministradoras, no hay ningún poste en las aceras, hay una plataforma única como en Enmedio, la calle Mayor o Puerta del Sol, y se facilita el acceso a los bomberos en caso de emergencias», detalló Simó. «Me sorprende, un poco, la postura de Castelló en Moviment, que pide no cuestionar informes de lingüistas, pero sí los de los técnicos y arquitectos», denunció. Y, dirigiéndose al PP, le dijo que «solo quieren generar ruido, para que no se hable de la corrupción».

La portavoz del grupo municipal popular, Begoña Carrasco, se defendió diciendo que «no miento, solo traslado las quejas de los vecinos, a los que ha empeorado la calidad de vida». Desde CSeM, el edil Iñaki Vallejo, puntualizó que «esto no es un ataque al gobierno», pero que no se puede tolerar un incremento del modificado del 20% y que se incluyan como mejoras actuaciones como la retirada del mobiliario.

ACUERDOS // Fue el punto que generó más debate y tensión -mención aparte al valenciano- de un pleno en el que volvieron los Reconocimientos Extrajudiciales de Crédito (REC), esta vez por un valor superior al millón de euros y en el que se aprobaron hasta 15 puntos (de los 21 votados) por unanimidad (incluidas las tres declaraciones institucionales).

A destacar una moción del grupo CSeM para incrementar la transparencia del proceso urbanístico, que salió adelante con los votos del equipo de gobierno, en contra de Cs y la abstención del PP. En base a la misma, se hará un registro con el historial de recalificaciones de terrenos desde el año 2000 hasta la actualidad, con el objetivo de auditar los años de la burbuja inmobiliaria y prevenir prácticas corruptas en los procesos urbanísticos, según el portavoz de CSeM, Xavi del Señor. Desde el equipo de gobierno, aseguraron que respaldan la propuesta por la transparencia que aportará pero que los recursos son limitados y que, hoy por hoy, priorizarán el Plan General. Cs lo rechazó «porque no estamos dispuestos a saltarnos la ley de protección de datos a la torera» y el PP se abstuvo también en base a la transparencia.