El Ayuntamiento de Castelló ha precintado el local Cerverinos (antiguo Cantó del Vi), en la zona de las tascas, «por su situación irregular, pues realiza una actividad que no es acorde a su licencia. Tiene licencia de supermercado y trabaja como si fuera una tasca». Así lo detalla el edil Rafa Simó, y asegura que el propietario «es conocedor de la situación, que se ha prolongado durante años, y que es ahora, en base a informes de la Policía Local», cuando han establecido la orden de cierre en base al «cumplimiento de la legalidad».

Una versión que dista de la de la gerencia del negocio, desde la que ven en el cierre de su local «una persecución a las tascas». «Tenemos una licencia de comercio de conveniencia, con derecho a la venta de comida y alcohol. Jurídicamente no hemos incumplido nada». Defienden la continuidad de su establecimiento y están dispuestos «a llegar a los tribunales para reabrir».