La Universitat Jaume I comienza este martes su calendario de exámenes y lo hace con un protocolo específico para prevenir el riesgo de transmisión de coronavirus con aforo máximo en cada aula, respeto de la distancia de seguridad, asistencia con la suficiente antelación para evitar aglomeraciones, uso obligatorio de mascarilla e higiene de manos. Una de las medidas para garantizar el cumplimiento de las medidas de seguridad ha sido el de habilitar el Pabelló Esportiu para realizar exámenes. Así, el espacio de 3.000 metros cuadrados ha permitido habilitar 600 mesas para la realización de exámenes presenciales.

Además, en los exámenes de horario de tarde se ha tenido en cuenta la limitación de circulación en horario nocturno a las 22.00 horas establecida por la Generalitat.

Asimismo, la Universitat Jaume I ha configurado los sistemas de climatización de los edificios para conseguir una buena ventilación en las aulas y diferentes espacios del campus, además de mantener unas condiciones de temperatura soportables.

Todos los edificios disponen de un sistema de climatización y ventilación forzada, es decir, tienen la capacidad de renovar el aire viciado de cada espacio por aire limpio del exterior. El sistema de ventilación forzada garantiza que, en las aulas, el aire se renueva totalmente entre 6 y 9 veces cada hora.

También se recomienda abrir las ventanas unos 10 minutos antes o al inicio de cada examen para facilitar la recirculación del aire a través del sistema de ventilación del edificio. Una vez pasados unos minutos, se pueden cerrar total o parcialmente las ventanas para evitar corrientes molestas de aire. Así mismo, se aconseja abrir 10 minutos cada hora aproximada o en los descansos en exámenes de larga duración.