Las grandes decisiones, entre la militancia y Ferraz. El nuevo reglamento del PSOE, aprobado por unanimidad en el comité federal del pasado sábado deja en manos de las bases la última palabra para que los socialistas puedan entrar en un pacto de gobierno con cualquier otro partido, un asunto en el que pasar por las urnas internas es ya obligatorio.

Esta decisión implica que si los afiliados no dieran su visto bueno, los líderes locales no podrían reeditar en el 2019 acuerdos como el que ha llevado a Ximo Puig a presidir el Consell, o los que han dejado fuera del Ejecutivo local al PP en casi todas las grandes poblaciones castellonenses: Castellón, Burriana, Almassora, la Vall d’Uixó, Nules, Vinaròs, Benicarló, l’Alcora; Onda, Segorbe o Cabanes. Igualmente tendrían que ratificar el acuerdo en Vila-real, donde el socialista José Benlloch tiene mayoría absoluta, pero gobierna junto a Compromís.

Por tanto, se inroduce la contradicción de que solo un nuevo modelo de gestión interna del partido, con un control de la militancia caso a caso hará posible evitar sorpresas. Es un reglamento que introduce amplios cambios, en general orientados a dar más poder a las bases, pero también a Ferraz y a su secretario federal, Pedro Sánchez, restando capacidad de decisión a los barones territoriales y a los locales.

Desde Castellón, las tres principales sensibilidades del PSPV cierran formalmente filas al valorar las nuevas reglas del juego. Si desde Sumem futur Tania Baños indica que no ven motivo de controversia y estima que todos los mecanismos para mejorar la participación de la militancia son buenos, José Benlloch (Guanyem Castelló) se pronuncia en un sentido similar, y cree positiva la apertura a la sociedad y al afiliado, Josep Lluís Grau (Militantes en pie) muestra su total satisfacción por los cambios. Por su parte, el secretario provincial, Ernest Blanch, ve también positivo reforzar el papel de los afiliados.

ALGUNAS DE LAS CLAVES:

CONSULTAS AL AFILIADO

Con el nuevo reglamento, será obligatorio consultar a la militancia en cada ámbito territorial la participación o no de los socialistas en los pactos de gobierno, así como el sentido del voto en sesiones de investidura que faciliten el gobierno a otro partido. Además, Ferraz podrá ordenar consultas en temas que crea de especial trascendencia, sin contar con nadie más.

ELEGIR CANDIDATOS

Los gobernantes autonómicos --el caso de Ximo Puig-- podría tener que someterse a primarias si lo solicita el 40% de la militancia o el comité de país. En el caso de los alcaldes de ciudades de más de 50.000 habitantes (Castellón y Vila-real) no hay cambios y los primeros ediles se validarán en las urnas si lo solicita el 50% de la militancia.

CESAR AL LÍDER

Solo los votos de los militantes pueden cesar al secretario general, que también es elegido por la militancia. Se limitan los mandatos a tres, de cuatro años cada uno, pero para hacer efectiva la barrera tienen que ser consecutivos. Ahora mismo Pedro Sánchez está iniciando el primero, por lo que puede ser el líder hasta el 2029 y sin límite si llegara a Gobernar en La Moncloa.