Los juzgados paralizaron ayer el desahucio de una casa en el barrio del Raval Universitari de Castelló. El piso es una de las antiguas viviendas de protección oficial (VPO) adquiridas recientemente por fondos buitre en la zona.

En la casa vive una familia con cuatro hijos, tres menores de edad y una chica de 18 años estudiante. La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) y el sindicato de inquilinos convocaron una concentración ante el aviso del desalojo. La comisión judicial anunció el aplazamiento porque no había abogado de oficio asignado para la defensa.

María Jesús Garrido, edila de Vivienda de Castelló y antigua dirigente de la PAH, se desplazó hasta el lugar para mostrar su apoyo a la labor de las organizaciones de la sociedad civil contra el desahucio y la compra de VPO por parte de los fondos buitre. «Hay que denunciarlos y parar esto desde todos los estamentos», señaló mientras recordaba que el 15% de los 9.000 alquileres de Castelló están en manos de grandes propietarios y dichos fondos.

Nicole Tudorache, desde la PAH, afirmó que la familia afectada «está al corriente del pago y aún tiene el contrato en vigor». Tienen cinco días para presentar la oposición en los tribunales e intentar ganar el caso. «Si la justicia actúa como toca, no irán a la calle», aseveró Garrido.

Barrio movilizado

El fenómeno de la llegada de los fondos buitre ha movilizado al barrio del Raval Universitari. Como publicó este periódico, cada viernes treinta familias de la zona se reúnen para discutir su difícil situación.

La mayoría de VPO están siendo descalificadas y vendidas a fondos buitre por los bancos. Dichos fondos, en vez de mantener el alquiler social asequible anterior, lo suben entre el 50 y el 60%.

Fuentes de la asociación de vecinos contaron a este diario que el viernes será la presentación oficial del sindicato de inquilinos que nace para defender sus intereses en Castelló.

Hasta el momento, la Concejalía de Vivienda contabilizó «al menos 80 inmuebles vaciados en lo últimos 18 meses» en la ciudad, a causa de las subidas en los precios de los alquileres.