El dinero que el Estado dedica a las prestaciones por desempleo en la provincia de Castellón es ahora sensiblemente menor que el que utilizaba para este fin en el 2007, antes del inicio de la crisis, aunque el número de parados que, como ha revelado en los últimos días la Encuesta de Población Activa (EPA), no deja de bajar, supone todavía más del doble que el de hace una década.

Las claves para comprender esta aparente contradicción se sitúan en el hecho de que son muchos los parados de larga duración que ya no tienen derecho a percibir prestaciones contributivas; que la mayor parte de las que se cobran son de carácter social y, por tanto, más bajas; la contratación temporal reduce las opciones de optar a cobrar el paro, o que los salarios son más bajos.

evolución // El análisis de los datos que aporta el Ministerio de Empleo, revela que en agosto de este año --último del que hay registro oficial-- los castellonenses inscritos en las listas oficiales del desempleo son casi 42.000, solo cobran prestaciones 18.692, menos de la mitad, con un coste de 14,6 millones de euros y una cuantía media de 781,9 euros.

Estos números contrastan con los 16.013 parados que registraba el Ministerio en el mismo mes una década antes, en el 2007, de los que la inmensa mayoría, 15.441, percibía una cantidad media mensual sensiblemente más elevada, de 1.064 euros.

La conclusión es que cada vez son menos los desempleados que cuentan con cobertura económica para paliar su situación. No es esta, además, la única diferencia entre un momento y otro desde el punto de vista de la protección de quienes no tienen trabajo.

De hecho, una parte destacada de las percepciones son en este momento las más bajas, de carácter social, ya que de los casi 18.700 castellonenses que cobran una prestación, solo 12.447 son de carácter contributivo, es decir, han trabajado lo suficiente como para poder tener derecho a una retribución que es más alta.

Del resto, 4.961 reciben un subsidio, 1.097 la renta activa de inserción y 434 están en el programa de activación del empleo. Por el contrario, una década antes, de 15.441 perceptores, 13.504 contaban con una prestación contributiva, según las estadísticas.

deterioro de la cobertura // Desde el punto de vista de los representantes de los trabajadores, el responsable de Empleo en CCOO de Castellón, Albert Fernández, explica este contraste al señalar que «se decidió por decreto que a los seis meses de estar cobrando el desempleo la prestación bajara un 50%». Hace hincapié también en que «más del 90% de los contratos son temporales, de horas, días, semanas, y es muy difícil acumular tiempo para cobrar el paro, pero cuando se logra, como los sueldos son muy bajos, la prestación también lo es».

Fernández recuerda que «muchas percepciones son sociales, las más bajas», y concluye que «se ha deteriorado mucho la cobertura social». Culpa de todo ello a las sucesivas reformas laborales e indica que «CCOO y UGT pedimos que se prorrogara el plan Prepara, algo que se ha hecho, pero que no es suficiente para paliar la difícil situación por la que pasan tantas familias».