La ministra de Fomento, Ana Pastor, garantiza que, tras la finalización de las obras del tercer carril, el corredor mediterráneo recuperará “la misma capacidad y frecuencia [de Cercanías] que tenía” antes, un aspecto que Renfe no ha precisado hasta ahora y que alza dudas en el sector y en el Consell. Así lo trasladaron ayer fuentes del PP provincial después de que uno de sus miembros, el diputado nacional Miguel Barrachina, se reuniese en la tarde-noche del martes con la ministra, los secretarios generales de Infraestructuras y Transporte, Manuel Niño y Carmen Librero, y el presidente de Renfe, Pablo Vázquez.

De hecho, en la cita se dijo incluso que tras las obras habrá “como mínimo los mismos” convoyes, indica Barrachina. Se abre así la puerta a que sean incluso más de las 40 frecuencias por sentido que había antes de las obras --y que ahora están circulando, debido a un parón en las obras por Fallas y Semana Santa--.

PROBLEMA “RESUELTO” // Según el diputado del PP, en la reunión se expuso que Fomento y Renfe “tienen resuelto el paso del AVE por solo una vía”, lo que se ha dicho que perjudicaría a la circulación de los Cercanías de Valencia a Castellón, un tramo muy saturado. Esto se llevará a cabo con la instalación de numerosos cambios de vía, según Barrachina. Este es precisamente uno de los aspectos que más está retrasando la obra. En la cita no se abordó una fecha para acabar las obras, con lo que no se sabe cuándo pueden finalizar las molestias a los usuarios de Cercanías, que a partir del martes 29 verán complementado el servicio en tren con autobuses. Sí se dijo que alrededor “del 80% de la obra está ejecutada”.

El senador de Compromís por Castellón, Carles Mulet, criticó a Barrachina por afirmar que llegará el AVE “cuando por esas vías no puede circular” por falta de tensión eléctrica, entre otros problemas, sino que se trata del tercer carril. Por ello calificó la obra de “monumental chapuza”. H