Sigue la guerra contra la Confederación de Empresarios de Castellón. El presidente de la patronal valenciana CEV, Salvador Navarro, acusó ayer a la castellonense de ser la única causante del concurso de acreedores en que se encuentra la autonómica Cierval, que es más que probable que desemboque en su desaparición. Navarro, olvidando la deuda de la patronal alicantina Coepa, responsabilizó a la CEC -y en concreto a sus «anteriores gestores»- de la «pesada mochila» con que ha «lastrado» a Cierval.

Todo esto lo pudo escuchar de primera mano el presidente de la comisión gestora de la CEC, Néstor Pascual, que asistió en Valencia a la charla que pronunció Navarro. Ante esto, Pascual se muestra cansado de los ataques a la patronal castellonense y afirma que las decisiones «no las tomaba solo Castellón... o alguien dejaba que llegase donde ha llegado». En este sentido, Pascual también responsabiliza a «todos» los dirigentes de Cierval y apunta que el tesorero de la confederación autonómica y de la valenciana es Cristóbal Aguado.

doble deuda // Y es que, aunque es cierto que la CEC adeuda unos 800.000 euros a la patronal autonómica, no lo es menos que la alicantina Coepa arrastra también un gran débito con Cierval, que esta acordó condonar en un 95% en noviembre. Esta puede ser la razón por la que ayer Navarro no criticó a Coepa y por la que el presidente de esta, Francisco Gómez, no censuró la intención de la CEV de absorber a las patronales provinciales y convertirse en la nueva confederación autonómica.

Y es que todos dan ya por extinta a Cierval. Navarro exigió ayer el pago a Coepa y CEC de sus deudas con la autonómica Cierval antes del día 27, dado que esta tiene que abonar a la Conselleria -como al parecer le ha pedido- las deudas que le han llevado al concurso de acreedores para intentar salvarla. Pero Gómez ya dijo ayer que pagar en esa fecha es «inviable» y el propio presidente de Cierval, José Vicente González, reconoció a Mediterráneo que es «muy complicado» salvarla.

absorción // Así, Navarro ya exhibió ayer que la CEV -la única patronal de la Comunitat «saneada», ya que es la única que no está en concurso- ya asume el papel de Cierval. En un discurso calcado al del presidente de la autonómica, José Vicente González -y al que este no mostró rechazo-, habló de cambiar los estatutos de la confederación valenciana para crear una entidad supraprovincial «fuerte, solvente», que asuma un nuevo modelo en que se integren las empresas (hasta un 30% de su asamblea) y los sectores, consejos provinciales, comarcales y colegios profesionales. En ella, el papel que quedaría para la CEC sería el de un porcentaje «muy bajo» de representatividad, sin capacidad de decisión y con una vicepresidencia castellonense «nombrada desde Valencia», señalan fuentes de la CEC.

En Castellón se niegan a aceptar esta propuesta, que ya se lanzó en Cierval en noviembre, y Pascual pide que toda la provincia, «unida», consiga la viabilidad de la CEC y que esta tenga representatividad en la Comunitat.