El nuevo secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y su homólogo en el PSPV el president de la Generalitat, Ximo Puig, mantuvieron ayer por la tarde una conversación telefónica en «muy buen tono» y de carácter «cordial», que supondría un paso para normalizar las relaciones entre ambos, e implica un acercamiento de sus posiciones, muy distanciadas hasta este momento, informaron ayer fuentes del entorno del líder del Consell.

Sánchez respondió con su llamada, que se produjo en torno a las 20.00 horas, al mensaje de Whatsapp con el que Puig felicitó el pasado domingo al ya máximo responsable del PSOE por su victoria en las primarias.

La conversación se produjo después de que el president, pese a haber defendido la candidatura de Susana Díaz en este proceso, diera su enhorabuena a Sánchez, abogara por pasar página y pidiera la «máxima cohesión» en el seno del partido para todo el proceso que ahora aborda la formación cara al congreso federal que tendrá lugar entre los días 16 y 18 del próximo mes de junio.