El pleno del Ayuntamiento de Castellón que se celebrará el próximo jueves, 22 de junio, abordará una modificación de crédito por valor de 14,5 millones de euros. Del total, aproximadamente 8 millones se destinarán a amortizar deuda, otros 6 para la compra de la parte privada del antiguo cuartel de Tetuán XIV y el resto para pagar facturas pendientes, según explicaron a este periódico fuentes municipales.

De los 8 millones para saldar la deuda contraída con los bancos, aproximadamente 2 provienen de sobrantes de las adjudicaciones de las obras con cargo a las inversiones financieramente sostenibles, es decir, del excedente conseguido por la diferencia entre el precio de licitación y el de adjudicación, teniendo en cuenta las bajas de las empresas. Los otros seis para amorizar deuda proceden del remanente de tesorería, que al cierre del ejercicio 2016, asciende a 16 millones.

Las mismas fuentes municipales matizan que este dinero se destinará a amortizar deuda, pero no necesariamente de inmediato, sino a lo largo del año. «El objetivo es que este dinero esté disponible para cerrar créditos, pero primero habrá que revisar y estudiar cuáles», explican.

Ya lo anunció la alcaldesa, Amparo Marco, que buena parte del remanente sería para disminuir las obligaciones con las entidades bancarias. En la liquidación del presupuesto municipal del 2016, ejecutado en un 84%, la primera edila explicó que arrojaba un recorte de la deuda de los 115 millones de euros que se encontraron en el 2015, hasta los 72,9 millones -42,1 millones menos-.

Respecto a la compra de Tetuán XIV -anunciada en el debate del estado de la ciudad-, se podrá hacer efectiva con los otros 6 millones de euros que entran en esta nueva modificación de crédito, y que se obtendrán también a cargo del remanente de tesorería.

Apoyos

El bipartito llevará al pleno esta elevada modificacion de crédito, para cuya aprobación necesitará de apoyos, por lo menos de su socio en el Pacte del Grau, Castelló en Moviment.

Según recogió ya este periódico, en principio la agrupación municipalista iba a respaldar esta modificación presupuestaria y es muy probable que lo haga, aunque las relaciones con el bipartito volvieron a tensarse en su último cara a cara, durante el debate del estado de la ciudad, en el que recriminaron la política de vivienda y desahucios.