El concejal de Podem-EUPV Fernando Navarro aclaró ayer la postura de su grupo en el Ayuntamiento de Castelló en lo que respecta al presupuesto rediseñado para hacer frente a la crisis sanitaria y económica del covid-19. Navarro apunta como único motivo del estancamiento al incumplimiento por parte del resto del equipo de gobierno de un compromiso adquirido en junio del pasado año: la reestructuración de áreas «para dar más músculo a Sostenibilidad y Lucha contra el Cambio Climático», una propuesta frenada ya en noviembre por la polémica de las fiestas y, tras retomarse las negociaciones en enero, ahora por la crisis del covid-19.

Podem-EUPV, que con dos concejales, es la tercera pata sobre la que se sustenta el Acord de Fadrell, junto a los 10 ediles del PSPV y los tres de Compromís, cree indispensable dotar de una sólida estructura administrativa —«ahora inexistente», puntualiza Navarro— al área que él mismo dirige (como responsable de Transició Ecològica) junto a Ignasi Garcia (Gestió Integral de Residus), con la derivación de técnicos y «el cambio de competencias que ahora están en otras áreas a Sostenibilidad». Podem quiere consolidar y blindar un área que ve «vital» para el futuro de la ciudad. Desde el PSPV trasladan que ya se trabaja en las «modificaciones de la relación de puestos de trabajo» que solicita Podem y que la voluntad es «tenerlas listas cuanto antes».

Pese al stand-by actual, Navarro es optimista: «No me planteo otro escenario que la llegada de ese gesto, por otra parte ya acordado». En esa dirección se mueve también el PSPV: «Es necesaria cuanto antes la aprobación del presupuesto que dé respuesta a la crisis y para el que ya hay sintonía entre las tres patas del Gobierno».