La portavoz del grupo municipal popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, anunció ayer que el PP ha presentado 30 enmiendas por valor de 8,3 millones de euros a la propuesta de Amparo Marco de presupuesto municipal para el 2019.

La alcaldable, quien compareció en rueda de prensa acompañada del concejal Carlos Feliu, destacó que las nuevas cuentas para la ciudad «llegan tarde y mal», porque no entrarán en vigor hasta finales de marzo «en el mejor de los casos», teniendo en cuenta que llegarán en plenas fiestas de la Magdalena, con la Semana Santa de por medio y con las elecciones de mayo en puertas. «Nos hubiera gustado que se hubieran aplicado criterios de transparencia y participación y hubieran abierto su diseño a todos los grupos, en lugar de pactarlos en secreto, con nocturnidad y alevosía», denunció.

Carrasco resaltó al mismo tiempo que se trata de unos presupuestos «sectarios», ya que incluyen programas como el Jornals de Vila que ofrecen «contratos basura» o porque recogen los 80.000 euros para el derribo de la Cruz del Ribalta. La portavoz también los tildó de «nefastos» desde el punto de vista económico, dado que incluyen la petición de un préstamo de siete millones para asumir el pago de obras «que no son de competencia municipal», como el antiguo edificio e la plaza Borrull o los colegios Vicent Marçà, Herrero y Elcano.