El grupo popular en la Diputación se quedó ayer solo en la defensa del modelo sanitario actual en la provincia y no logró el apoyo del resto de grupos a la propuesta vecinal para frenar el proceso centralizador que ha emprendido la Generalitat en los últimos meses. La junta de portavoces que había convocado el presidente de la corporación castellonense, Javier Moliner, acabó ayer sin acuerdo para llevar al próximo pleno en forma de declaración institucional (que necesita el consenso de todos los grupos) la propuesta que un día antes habían pactado los populares y el grupo Compromís.

De hecho, esta formación retiró su apoyo a la moción, lo que motivó que el portavoz del PP, Vicent Sales, criticara que su homólogo nacionalista, Xavier Trenco, se sometiese “a Valencia” y antepusiese “los intereses de su partido a los de los castellonenses”.

Sales censuró que Compromís cambiase finalmente de bando y respaldase el punto de vista del PSPV, con quien forma gobierno en Valencia y junto al que impulsa el cambio en el modelo sanitario, en aspectos como el banco de sangre o la reorganización en seis grandes departamentos para toda la Comunitat, algo que recoge explícitamente la propuesta que deriva de las tres federaciones de vecinos de Castellón y que Compromís y PP habían pactado.

El argumento de este grupo para retirarse de la moción conjunta es que la “única intención” de Compromís era la de lograr “el consenso de los grupos políticos de la Diputación” y, dado que no se ha logrado “no tiene ningún sentido” continuar, señaló ayer Trenco. Un día antes había censurado el uso partidista que había hecho el PP de la moción, al hacerla pública antes de llegar a la junta de portavoces, algo que la propuesta también quería evitar, como recoge textualmente.

Desde el PSPV se fue un paso más allá. Su portavoz, José Benlloch, que no estuvo en la junta de portavoces, señaló que este asunto es un tema que ha comandado el PP, como demuestra que las federaciones vecinales no se hayan reunido con el resto de grupos o algunas no hayan pedido opinión a “varias de sus asociaciones de vecinos”, como han “constatado”. Por ello, señala que todo es “una operación del Partido Popular para tapar la corrupción”.

Ciudadanos presentó una enmienda para tratar de lograr el consenso pero tampoco apoyó la moción y Castelló en Moviment también negó el respaldo. H