El portavoz de Economía en Les Corts, Rubén Ibáñez, recomendó ayer al Consell que focalice el tijeretazo en los presupuestos de la Generalitat del 2019 en el sector público, una administración paralela que, según el popular, en manos de la izquierda se ha convertido en una «máquina de perder dinero y de colocar gente».

Ibáñez denunció en rueda de prensa en Les Corts incumplimientos del Botànic respecto a sus promesas de reordenar el sector público y cifró en 1.000 millones «el pufo» dejado la pasada legislatura por el aumento de la deuda. Dijo que mientras los números rojos han crecido en cuatro años el presupuesto aumentó el 33,8%, lo que supone casi 700 millones más que en el 2015.

Ibáñez indicó que en cuatro años, el Consell no ha aprobado la anunciada ley del sector público que debía poner coto a los desmanes y subraya que también ha incumplido con el Ministerio de Hacienda, ya que en el último plan de ajuste se comprometió a que el 1 de julio del 2019 iban a suprimirse 11 entidades, un objetivo que no se ha cumplido.

Además, para el popular las empresas públicas son un colocódromo ya que la partida de personal se ha disparado un 41%.

En cuanto a la fórmula de España Suma de cara a una posible repetición de elecciones generales, indicó que «cualquier alianza liberal es ciertamente saludable», pero «de ahí a cerrar acuerdos electorales dista bastante».