Cuando a finales del 2007 estalló la burbuja inmobiliaria, además de desplomarse el precio de la vivienda en Castellón se vino abajo también el precio del suelo. Lo hizo por dos motivos: promotoras y bancos trataron de deshacerse de miles de metros cuadrados a precio de ganga y, al mismo tiempo, los ayuntamientos dejaron de recalificar terrenos a la espera de que pasara el huracán. Y aunque en los últimos dos años los precios se han recuperado ligeramente, el suelo en la provincia sigue siendo barato.

Quienes en Castellón han comprado alguna parcela de suelo urbano durante el último trimestre del 2017 han pagado un precio medio de 130,6 euros el metro cuadrado, según datos del Ministerio de Fomento. Una ganga si se compara con los 349,2 euros desembolsados a finales del 2007. O lo que es lo mismo: en una década los precios se han depreciado un 63%. Aunque esos casi 350 euros de hace diez años pueden parecer un precio muy elevado no es el máximo de un periodo en el que la especulación se movió a placer. De hecho, el premium se situó en los 415,3 euros entre abril y junio del 2005, y no fue hasta bien entrado 2008 cuando los precios empezaron a bajar de los 300 euros el metro cuadrado.

Que el metro cuadrado de suelo urbano se cotice en Castellón a una media de 130 euros coloca a la provincia como la más barata de la Comunitat Valenciana. En Valencia el coste asciende a 233,8 euros, mientras que en el caso de Alicante supera los 145 euros. A nivel nacional, los precios más altos se encuentran en Madrid (272,9 euros el metro cuadrado), Barcelona (242,7) y San Sebastián (212,75). Al otro lado de la tabla se sitúan provincias como Lugo (21), León (43,2) o Teruel (63).

Los precios de ahora nada tienen que ver con los que se registraron en Castellón antes de la crisis como tampoco lo hacen el número de operaciones de compraventa realizadas y su valor económico. Un par de ejemplos basta para entenderlo: en 2007, se contabilizaron en la provincia 447 operaciones de compraventa de suelo que alcanzaron un valor de 171 millones de euros. Durante el año pasado, el número de transacciones fue de 226 y por un valor de 21,2 millones.