El Ayuntamiento de l’Alcora impulsa el primer protocolo de actuación para proteger perros y gatos abandonados o perdidos.

En el caso de encontrar un can, la Policía Local comprobará si porta el chip identificativo. Si lo tiene, avisarán al propietario, que deberá acudir a recogerlo en 48 horas. Si pasado ese tiempo no lo ha hecho, el centro de núcleo zoológico contratado por el consistorio se hará cargo del animal. Entonces, el propietario deberá desplazarse al mismo y asumir los gastos de la gestión.

Por otro lado, en los perros no identificados el cuerpo policial difundirá su imagen a través de las redes sociales para facilitar su adopción. El interesado tendrá 15 días para implantar el chip y dar de alta administrativa al animal. La oficina de Medio Ambiente se encargará de abastecer la comida durante los dos días que esté en dependencias municipales.

En cuanto a los gatos, la policía avisará en primer lugar a la protectora ADDA para comprobar si forma parte de las colonias que controlan. Desde esta entidad se encargarán de decidir el procedimiento a seguir con los felinos.

«Es una iniciativa que tiene como intención unificar criterios de intervención y colaboración ante estas situaciones y que se enmarca dentro de la sensibilidad y el compromiso del equipo de gobierno por garantizar la defensa, protección y bienestar de los animales», subraya el alcalde del municipio, Samuel Falomir.