Más de un año en lista de espera es lo que están muchos de los pacientes que deben operarse de cataratas en el Hospital Provincial de Castelló. Para intentar remediar esta demora, el centro hospitalario comenzará, a partir de este lunes, a operar dos días por las tardes. De este modo, el equipo de oftalmología del centro hospitalario se adhiere al autoconcierto puesto en marcha por la Conselleria de Sanidad para que los quirófanos realicen también intervenciones en horario vespertino.

Y es que, como ya ha indicado en diversas ocasiones el principal sindicato médico de la Comunitat Valenciana (CESM-CV), uno de los principales motivos de que el autoconcierto no haya obtenido los resultados esperados está en que oftalmólogos y traumatólogos, dos de las especialidades que más demora acumulan, no habían sido proclives a adherirse a dicho plan.

lista de espera // Actualmente, uno de cada cinco valencianos que está en lista para entrar a quirófano es por un problema de cataratas. La última cifra que se tiene, 10.598 pacientes en espera, que data del pasado junio, es la más alta desde que la Administración ofrece registros cada tres meses. A pesar de que se trata de la operación que más se realiza en el sistema sanitario, su demanda no va a dejar de crecer por el envejecimiento de la población, de ahí la necesidad de reforzar las intervenciones fuera del horario habitual.

Mientras la solución adoptada por el Provincial plantea operar también por las tardes, en el Hospital General de Castelló se está optando, como informó Mediterráneo, por derivar pacientes que deben operarse de cataratas a las clínicas de la fundación pública Fisabio e Imed, ambas en València. La cuantía anual prevista para hacer frente a estas derivaciones es de 556.000 euros.

Actualmente, los quirófanos de Fisabio Oftalmología Médica (FOM) están abiertos de mañana, y cuatro de ellos también por las tardes y los sábados de mañana, un aumento de actividad que requiere de más profesionales, de ahí que la Conselleria busque contratar a más especialistas.

negativa // El problema en este caso radica en que la mayoría de personas a las que se les ofrece poder ser intervenidas en la capital del Turia rechaza la propuesta por los inconvenientes que acarrea el desplazamiento a la hora de realizar pruebas y controles, por lo que eligen quedarse en la lista de espera para ser operado en Castelló, pese a que tarden meses en llamarles para la intervención quirúrgica.