Investigadores del proyecto nacional Graphos, iniciado en los últimos meses por la empresa castellonense Becsa junto a otras siete de diferentes sectores, empezarán en el 2019 un estudio sobre la mejora de la conductividad eléctrica y su capacidad de almacenar calor en pavimentos asfálticos. El objetivo de construir firmes de carreteras que faciliten la recarga por inducción de los coches eléctricos y, con ello, potenciar su uso.

Graphos tiene como objetivo facilitar la integración de grafeno en productos y aplicaciones industriales, dando lugar a nuevos materiales compuestos con propiedades físicas y mecánicas mejoradas que puedan ser comercializados. Becsa se encarga del estudio de la incorporación de este elemento en diferentes materiales de construcción.

tecnología // Hasta el momento, la empresa castellonense ha desarrollado con éxito un aditivo basado en grafeno para mezclas bituminosas semicalientes fabricadas con espuma de betún, lo que permite la fabricación, extensión y compactación de estas combinaciones a menor temperatura que las convencionales. Con esta tecnología se mantienen sus prestaciones mecánicas, tal y como explican responsables del proyecto.