Fiestas por Cultura. El PSPV trasladó a Compromís de manera formal su oferta para resolver la crisis del tripartito de Castelló durante la reunión de la comisión de seguimiento del Acord de Fadrell, que se celebró ayer en la sede de los socialistas en la calle Carcagente. La formación nacionalista evitó posteriormente concretar su respuesta en un sentido u otro e instó a estudiar el pacto de gobierno «en toda su amplitud». Para ello se ha fijado otra reunión en el mismo lugar y a la misma hora, las cinco de la tarde, el próximo miércoles día 8 de enero.

La crisis abierta por la decisión de Compromís de votar con la oposición --Partido Popular, Ciudadanos y Vox-- y en contra de sus socios de gobierno --PSPV y Podem-EUPV-- la moción sobre la convocatoria de la asamblea de Fiestas no se cerrará de un día para otro, porque tampoco se abrió de la noche a la mañana. Fiestas fue el detonante que evidenció la creciente merma de confianza de los socialistas en Compromís, a quienes aprietan ahora en el equilibrio de fuerzas.

Tampoco se resolverá el conflicto del equipo de gobierno mejorando únicamente la coordinación del tripartito, como apuntaban Compromís y Podem-EUPV en la previa de la comisión de seguimiento. La mayoría del PSPV aboca al cambio de competencias en el Ayuntamiento de Castelló, al baile de concejalías, o a la rectificación de Compromís en su postura sobre Fiestas. En la reunión de ayer, que duró alrededor de hora y media, el equipo socialista puso encima de la mesa la concejalía de Fiestas, que actualmente dirige Pilar Escuder. Se la ofreció a Verònica Ruiz y pidió a cambio la de Cultura, actualmente en manos de Compromís. Argumentan por un lado «coherencia» después del voto negativo en la moción y además se da el caso de que los presupuestos de Fiestas y Cultura son similares.

Amplitud // Tras la reunión, Miguel Ginés, portavoz de Compromís, eludió tanto el sí como el no a una propuesta que dijo «respetar», y a la que no cerró la puerta de forma tajante, ganando de esta forma tiempo y margen de maniobra para encontrar una salida. Abogó por el momento por un acuerdo más amplio, sin entrar en detalles. Compromís estudiará «todo el Acord de Fadrell», no solo el trueque propuesto por el PSPV. «No es una cuestión de si Compromís quiere o no (Fiestas), debe haber un consenso de los tres partidos», insistió Ginés.

Los tres partidos salieron de la reunión subrayando en sus discursos la voluntad reforzada de superar una crisis que nadie niega. La pelota está en el tejado de Compromís. «Confiamos en llegar a un acuerdo», dijo Ginés. Antes, Paco Gil, secretario general del PSPV local, había valorado la constitución de la comisión de seguimiento. También apuntó que en la reunión de la próxima semana esperan tener una respuesta clara de Compromís sobre su propuesta. El tercer elemento del equipo de gobierno, Podem-EUPV, confió, en palabras del asesor del grupo municipal Raúl Beltrán, en llegar a «un punto intermedio estudiando los márgenes» de la situación y firmar un acuerdo en el que «todas las formaciones estén cómodas». «Vemos que hay recorrido», aseveró el portavoz de la confluencia, que en principio queda al margen del hipotético trueque de competencias.

Coordinación // Y es que más allá del cambio de concejalías, la viabilidad del tripartito de Castelló pasa por una redefinición de las relaciones entre sus miembros. Mejorar la coordinación del equipo de gobierno es una vieja reclamación tanto de Compromís como de Podem-EUPV, algo que se hizo patente, por ejemplo, a la hora de encarar la forma de compensar financieramente la bajada de la recaudación por el Impuesto de Bienes Inmuebles, en el marco de la negociación por los presupuestos, y donde se impuso la tesis del PSPV.

Precisamente esa negociación ha sido la primera y más vistosa víctima de la crisis del tripartito. La negociación de las cuentas para el recién estrenado 2020 sigue parada y por el momento se han prorrogado las del 2019. Compromís considera una «prioridad», en boca de Ginés, «desarrollar unos presupuestos de progreso para Castelló», y con esa idea afronta «cualquier puntualización del Acord de Fadrell». La partida está en marcha. «Lo primero es resolver este problema» con Fiestas, advirtió el socialista Gil. «Lo prioritario es reconducir la crisis», rubricó a su vez Podem.