El president de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, afirmó ayer que el Gobierno central ha aceptado la propuesta valenciana para cogestionar el ingreso mínimo vital aprobado el viernes por el Ejecutivo de Pedro Sánchez. El jefe del Consell dijo que de dicha ayuda se beneficiarán unas 100.000 personas en la Comunitat (10.000 en Castellón).

El socialista aplaudió la iniciativa y recordó que ya la puso en marcha el Botànic y ahora espera que la cogestión agilice y facilite la tramitación de expedientes en la Comunitat. Así lo confirmó el president durante la rueda de prensa posterior a la reunión telemática que mantiene semanalmente Pedro Sánchez con las autonomías desde que arrancó la pandemia del coronavirus.

El nuevo instrumento del Gobierno aspira a duplicar los beneficiarios de las prestaciones autonómicas y repartirá más de 300 millones entre los valencianos.

Puig remarcó que el ingreso mínimo vital tiene «una enorme relevancia» y es un «gran paso adelante», al tiempo que incidió, durante la reunión, en la «necesidad de que haya coordinación entre administración» para que se implemente «de la manera más eficaz». En este sentido, anunció que la Generalitat pedirá un convenio «para que lo más pronto posible pueda gestionarse».

Respecto a la solicitud para pasar a fase 3, Puig pidió «prudencia» y dijo que se hará «cuando se cumplan los parámetros epidemiológicos». «Actuaremos de acuerdo con los expertos», dijo.