El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, calificó ayer de «histórica» la visita que una delegación valenciana ha iniciado en Cuba con el propósito de reforzar relaciones y buscar nuevas oportunidades de negocio tras el deshielo político que ha posibilitado el levantamiento del embargo norteamericano y la apertura al exterior de este mercado. Para el jefe del Consell, se trata de un momento «estratégico» para la isla en la que la Comunitat Valenciana no puede faltar.

«España y la Comunitat Valenciana, en particular --recordó Puig--, han estado siempre vinculados a esta isla y sería terrible que precisamente ahora que es cuando se puede generar más negocio y apertura, los valencianos estuviésemos en fuera de juego», según indicó antes de iniciar viaje al país caribeño.

El jefe del Ejecutivo valencianos encabeza una delegación formada por representantes de 23 empresas valencianas, así como por el conseller de Economía, Rafa Climent; el Consejo de Cámaras; la Confederación Empresarial Valenciana y el rector de la Universidad de Alicante.

poder geoestratégico // «El objetivo de nuestra visita es dar una oportunidad a las empresas valencianas y generar una plataforma de apoyo para que estas compañías puedan ampliar un mercado de gran magnitud y con un gran potencial geoestratégico», declaró el presidente. En este sentido, señaló que, aunque Cuba no representa el mercado más importante de las empresas valencianas, el «factor oportunidad» es «fundamental» en estos casos, puntualizó el morellano.

Puig también se refirió al proceso de deshielo impulsado por el presidente de EEUU, Barack Obama, como un hecho que va a hacer posible «cerrar la negra etapa de Aznar», en referencia a la Posición Común Europea que el expresidente impulsó entre los socios comunitarios, que se convirtió en un escollo cara a establecer relaciones con la isla. «Creo que en estos momentos nadie sensato vería con malos ojos este acercamiento a Cuba», añadió al respecto el socialista. H