Finalmente la remodelación del Consell fue más profunda de lo anunciado. Cinco conselleries se han visto afectadas por los 13 cambios con los que el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, busca dar “un nuevo impulso” a la gestión de su gobierno, con especial incidencia “en las prioridades a implementar”, tal y como transmitió a Mediterráneo. La conselleria más beneficiada es la de Economía, donde se producen cinco nombramientos y además se crea la secretaría autonómica de Empleo, que se cubrirá en septiembre, según dijo ayer la vicepresidenta, Mónica Oltra.

Es a esta conselleria donde llega la vila-realense María Dolores Parra como directora general de Internacionalización. También aterrizan otras tres directoras generales y Blanca Marín como número 2. Entre el resto de nombramientos, destacan el de Narcís Vázquez como secretario autonómico de Salud Pública (sustituye a la dimitida Dolores Salas); o el de María José Mira como secretaria autonómica de Modelo Autonómico y Financiación.

mestizaje // Mira sale precisamente de la Conselleria de Economía (donde deja su puesto a Marín) tras sus diferencias con el conseller Rafael Climent. Aun así, tanto Puig como Oltra defendieron “el buen funcionamiento del mestizaje” (la mezcla en los puestos directivos de gente del PSPV y Compromís), en palabras de Puig. Oltra fue más allá y señaló que el resultado está siendo “mejor del que podíamos prever”.

Más allá de esto, con la remodelación, Puig refuerza la vertiente económica del Consell, como ayer adelantó este diario. Y para ello ha creado cuatro nuevos cargos. Además de la secretaría autonómica de empleo, hay dos delegados del Consell (Joan Calabuig para relaciones con Europa y Francisco Javier Uceda de Modelo Social Valenciano, dependiente de Oltra); y una nueva dirección general, la de Industria y Energía, que ocupará Diego Maciá.

Eso sí, también se suprimen algunos puestos, como el caso de la dirección general de Planificación y Ordenación Familiar.

estabilidad // Así, Puig confía en tener gobierno estable “para una buena temporada”. Eso sí, no esconde que en un año puede haber “otro cambio de este tipo”, al apostar por perfiles de estadista y ser la política “una operación dinámica: todas las empresas hacen cambios para mejorar”. Oltra negó que los cambios sean para contentar a Podemos, aunque si lo hacen, “estupendo”. H