La Generalitat no quiere caer dos veces en el mismo error durante la desescalada. Por tanto, evitará anticiparse y pedir la entrada en la fase tres para este próximo lunes, asumiendo así estar durante 15 días en esta etapa, y solicitarla para el 15 de junio. De este modo, se opta por «la máxima prudencia», después del intento fallido de querer acelerar la entrada en la fase dos, unos planes que, tras ser anunciados, no llegaron a materializarse al detectarse un rebrote.

Así lo confirmó ayer el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, quien apostó por ofrecer una «imagen de rigor» cara a los turistas que llegarán próximamente. «Cuando la Comunitat pase a fase 3 lo será con todas las garantías y con la posibilidad de ofrecer una seguridad sanitaria que es activo fundamental para la reactivación», señaló Puig.

De todos modos, el jefe del Consell sí precisó que, en todo caso, van a seguir hablando con el Ministerio de Sanidad para ver «si hay alguna medida que se pudiera avanzar la semana que viene». Sobre la mesa está permitir ya los desplazamientos entre las tres provincias valencianas, pensando especialmente en aquellos que tienen una segunda residencia. En este sentido, el Gobierno baraja ya en la fase 3 permitir también viajes entre comunidades autónomas. Y es que para la Comunitat resulta crucial cuanto antes permitir estos movimientos a las zonas de costa, ahora que las playas ya están operativas cara a la reactivación.

Al respecto de este punto, Puig indicó que es necesario estar expectantes a ver lo que ocurre el próximo fin de semana, el primero en fase 2 y con playas abiertas y ver «las consecuencias».

financiación // El president defendió que el debate en torno a la financiación autonómica debe hacerse «con rigor» y «no a beneficio de inventario de una comunidad autónoma», al ser preguntado sobre los criterios de reparto del fondo de 16.000 millones que el Gobierno destinará a las autonomías para mitigar la pandemia. Más información, página 30.