El líder del PSPV y presidente de la Generalitat, Ximo Puig, pidió ayer en Castellón «unidad» a «los compañeros» como el camino para «superar las divisiones y mirar hacia delante», tras el tenso congresillo celebrado el domingo en la Pobla para elegir a los delegados al congreso federal, en el que, tras duras negociaciones, no hubo consenso y se presentaron dos listas, de las que ganó la auspiciada por partidarios de Puig.
El secretario general de los socialistas valencianos explicó además que su decisión de no acudir como delegado a Madrid responde a que no quería «que hubiera ningún tipo de problema» por su «culpa» ni su «responsabilidad».
un entorno agitado // Ximo Puig insistió en lanzar mensajes de unidad y en reclamar la «mayor cohesión» interna, después no solo de la convulsa cita castellonense, sino del disenso que llevó en Alicante a la dimisión del secretario provincial, David Cerdán (dirigente muy crítico con Puig); o de la aprobación de una lista de delegados en Valencia, liderada por José Luis Ábalos, que no estuvo exenta de polémica por excluir a los partidarios del exlehendakari Patxi López.
De vuelta en Castellón, las valoraciones de los cargos socialistas y algunos de los protagonistas consultados sobre su visión de los resultados del congresillo de la Pobla incluyen también voluntad de pasar página y trabajar desde la unidad interna, aunque con algo más que matices adicionales, que van desde casi la autocrítica, hasta la protesta clara.
En el caso de la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, que, al igual que Puig, ha quedado al margen del proceso federal, que tachó de «acto de democracia», quiso destacar que en el proceso «el voto de un militante valía igual que el de la alcaldesa o presidente de la Generalitat».
Por su parte, el portavoz del PSPV en la Diputación y alcalde de Vila-real, dijo estar «contento» por el triunfo de los afines a Puig, pero remarcó que lo ocurrido el domingo «no fue un buen ejemplo», y deseó que el enfrentamiento «no se repita en el congreso de País, ni el de provincia, porque sería una lástima».
Mientras el secretario provincial del PSPV, Francesc Colomer, resaltó la alta participación de los socialistas castellonenses y el final correcto de la cita, la vicesecretaria provincial del partido y alcaldesa de Almenara, Estíbaliz Pérez, número uno de la lista ganadora, destacó la voluntad «de consenso» de la candidatura.
En cuanto al portavoz de la plataforma de Pedro Sánchez y cabeza de la lista que perdió la votación, Josep Lluís Grau, también apeló a «trabajar juntos», e interpretó el resultado como «una victoria», pero rechazó «el veto» a su nombre de los afines a Puig.
