L os castellonenses lo tienen cada vez más difícil para ser atendidos en su centro de salud. Así lo aseguran las diferentes asociaciones de vecinos, usuarios y consumidores, que a su vez reciben las quejas diarias de los afectados, que denuncian el colapso, en especial, de la atención telefónica.
«El sistema lleva mucho tiempo al límite y la situación es alarmante», indica Juan Carlos Insa, secretario general de la Unión de Consumidores de Castellón (UCE). Insa corrobora que ha habido un aumento de quejas de usuarios de la sanidad pública en las últimas semanas, una vez pasado el periodo vacacional. «Sobre todo por la dificultad para poder contactar con los centros de salud, algo prácticamente imposible vía telefónica», asegura. Ante el aumento de casos de coronavirus, Insa apunta que «el sistema va a colapsar», y pide una «solución duradera a largo plazo», puesto que «la pandemia no va acabar de un día para otro» y el resto de enfermedades «necesitan» ser tratadas «con normalidad». La UCE lamenta en ese sentido la falta de previsión de las instituciones.
Estos usuarios —algunos enfermos crónicos— sufren los «daños colaterales» del covid, como define Vicky Amores, presidenta de la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos, que también ha apreciado un aumento de quejas de usuarios por el colapso de la atención primaria. «Una persona joven puede gestionar sus citas con la app , pero a una persona mayor le puede costar. Por teléfono es prácticamente imposible y de manera presencial no es lo mejor por el coronavirus», explica.
Insa señala asimismo la cadena de problemas que causa este colapso, ya que reciben casos de gente que, al no ser atendida, decida acudir a Urgencias, generando a su vez también colas en este servicio, abundando en la saturación del sistema que viene indicando Mediterráneo durante las últimas semanas. El Hospital General de Castelló, por ejemplo, asume ya el mismo número de visitas en Urgencias que antes de la irrupción del covid-19, cuando la atención presencial no estaba restringida.
