Dos de los quioscos más emblemáticos de Castellón, el de la plaza de la Paz y el del parque Ribalta, ultiman las obras y tramitaciones pendientes para reabrir en los próximos meses, el primero para verano y el otro, un poco más tarde, en otoño.

En el del Ribalta está todavía por adjudicar su explotación, después de unas obras de reforma de la antigua caseta del pozo que permitirán recuperar el servicio de quiosco-cafetería que tuvo el céntrico parque antaño. Llegó incluso a tener dos, el Campos y el Martínez, en las dos esquinas del norte de la glorieta del Obelisco, en el andén central. El nuevo, que se asienta en una caseta que es un bello ejemplo de arquitectura agrícola modernista de finales del siglo XIX, junto al estanque, contará con cocina, barra y zona de público para 10-12 personas con al menos dos mesas, mientras que el porche de la antigua construcción se destinará a terraza, con mesas y sillas en contacto directo con la riqueza botánica del parque Ribalta. Este proyecto llevó aparejada una intervención en el palomar, que se ha adecuado como baños públicos.

En cuanto al otro quiosco, el de la céntrica plaza de la Paz, se adjudicó el pasado mes de marzo. Tiene una superficie utilizable de 25,39 m2 y una terraza de 40 m2 con capacidad para 10 mesas y 40 sillas. La concesión, a l’Antiga Valenciana, se otorga por un plazo determinado de cinco años.

La reapertura del quiosco de la plaza la Paz no solo ha tenido que superar un proceso de concesión administrativa sino que previamente el Ayuntamiento de Castellón tuvo que ejecutar la instalación de un baño que dé servicio al emblemático espacio urbano y sin el que, legalmente, no se podía sacar a licitación.

La existencia de un quiosco en la Paz viene de lejos. En 1901 se vendían periódicos. Sufrió remodelaciones durante décadas hasta convertirse en lo que es hoy.

Para poder abrir, el adjudicatario deberá todavía realizar una serie de trabajos de acondicionamiento, tal como figura en el pliego, que incluye la eliminación de instalaciones incompletas o sin uso, la renovación de la instalación eléctrica, adecuación de redes de saneamiento, la reparación de las persianas e instalación de luces de emergencia.

DINAMIZADORES // En los dos casos, pretenden revitalizar y dinamizar las zonas que ocupan, tanto el que es el principal pulmón verde de la ciudad, como la céntrica plaza junto al Teatro Principal.

Los antiguos quioscos del Ribalta fueron punto de encuentro de varias generaciones y ahora se puede recuperar su esencia con este nuevo servicio. En el caso del de la plaza de la Paz, además, se ha incluido en la concesión una propuesta de actividades socioculturales y lúdicas con el objetivo de poder potenciarlo.