El Hospital Provincial de Castellón está al nivel de los hospitales Monte Sinaí y Presbiteriano (Nueva York), Jackson Memorial (Miami), el centro de Especialidades King Fahad (Arabia Saudí), el Cancer Hospital de Beijing o el Arthur James Cancer Hospital (Ohio-EEUU) al aplicar, al igual que estos centros sanitarios, la radioterapia intraoperatoria. Una técnica de la que se beneficia una media de 25 pacientes al año, según los datos ofrecidos por el centro sanitario castellonense a este periódico.

«Esta técnica permite dirigir una dosis única y exacta, de alta intensidad, al lecho tumoral durante la cirugía que en ese momento se practica en el quirófano, protegiendo los órganos y tejidos sanos adyacentes desplazables, no afectados por tumor y sensibles a la radiación», explicó ayer lunes el director del Instituto Oncológico del Hospital Provincial, Carlos Ferrer, en una jornada en la celebraron el Día Mundial Contra el Cáncer.

A través de un planificador, determinan la dosis de radioterapia que hay que dispensar, por lo que ahorran al paciente sesiones de radioterapia posteriores a la intervención, revirtiendo en una mejora tanto física como psicológica. Asimismo, al optimizar el tratamiento, contribuyen al sostenimiento del sistema sanitario. De hecho, una única dosis aplicada a través de esta técnica de primer orden equivale al tratamiento de radioterapia convencional durante seis semanas para un paciente de cáncer . Además, el enfermo se beneficia de una menor frecuentación hospitalaria, menos sesiones de tratamiento en ciertos casos --como los cánceres de mama precoces con pronóstico favorable-- y también minimizan los efectos secundarios sobre tejidos sanos, según informaron fuentes sanitarias.