Construido en 1907, el Maset Blau de la avenida Alcora es un emblemático edificio de Castellón, ahora propiedad del Ayuntamiento, que fue en su día vivienda unifamiliar y que a lo largo de los años ha sido objeto de actos vandálicos, de ocupaciones y de un deterioro progresivo que 110 años después de su construcción hace necesaria una rehabilitación arquitectónica integral que ya está en marcha. El consistorio ha adjudicado los trabajos a Becsa SAU, con un plazo de ejecución de 10 meses y por un importe de 362.000 euros, con cargo al remanente del 2015, a través de las inversiones financieramente sostenibles del año pasado.
El Maset Blau, con 313 metros cuadrados construidos, es un ejemplo de arquitectura modernista y está protegido por su interés histórico-artístico. Su estado de conservación es «muy deficiente», según el proyecto básico y de ejecución de su rehabilitación, elaborado por el arquitecto municipal Blas Jovells. En base al mismo informe, «se plantea la intervención en el edificio, con valores arquitectónicos a conservar, para destinarlo a un nuevo uso compatible con el educativo-cultural, aún sin determinar, entendiendo que ello redundará en el mantenimiento vivo» del singular inmueble del distrito oeste. Precisamente sobre el futuro uso, fuentes municipales, explicaron que todavía se están barajando varias opciones.
LAS OBRAS
En cuanto a la intervención en sí, el arquitecto municipal recoge en su proyecto que es «imprescindible demoler y construir de nuevo forjados, cubiertas y carpinterías, más las particiones y revestimientos que su nuevo uso requiera, y proceder a dotarlo de todas las instalaciones necesarias: agua, saneamiento, electricidad, iluminación, voz-datos o climatización». «Se trata, en definitiva, de construir un edificio de nueva planta conservando, en la mayor medida posible, los muros de fachada y el tratamiento de los mismos».
