Los regantes piden al president de la Generalitat, Ximo Puig, que medie para que el Gobierno lleve a cabo la obra necesaria para poder llenar al 100% el embalse de Arenós (ahora solo puede almacenar aproximadamente la mitad de los 137 hectómetros cúbicos de su capacidad teórica), un proyecto que resolvería los problemas de sequía de la cuenca del Millars, está tasado en unos 50 millones y que está paralizado.

Esta fue una de las demandas que la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunitat Valenciana (Fecoreva) planteó ayer a Puig en una toma de contacto en la que el jefe del Consell escuchó sus propuestas.

Otra de las solicitudes, ya en el ámbito de las competencias autonómicas, se centró en la solicitud para activar las ayudas a la modernización de regadíos, algo a lo que Ximo Puig respondió ayer que ya habían hecho, tras varios años suspendidas, aunque «con el poco dinero que hay», señala a este diario el vicepresidente de Fecoreva, Enrique Font.

depuración // En cuanto a la utilización de aguas depuradas, los regantes se mostraron dispuestos a hacerlo, siempre que sea «a coste cero, ya que nosotros no ensuciamos el agua», afirma Font.

En la cita en el Palau de la Generalitat, que duró aproximadamente una hora, Puig también escuchó la posibilidad de utilizar agua desalada para regar en Alicante, algo que en la cuenca del Millars «no se puede ni pensar», según Enrique Font. Y es que, al alto coste de producir agua desalada habría que añadir el de elevar esta hasta la cota 100, desde donde poder repartirla. «Solo en la zona concreta de la Vall d’Uixó podría tener algún sentido», señala a este respecto el también presidente del Sindicat Central d’Aigües del Millars.

Otra de las actuaciones autonómicas que se encuentra entre las reivindicaciones de Fecoreva es la de suplir «el déficit estructural» en cuanto a pozos de emergencia contra la sequía en el Maestrat, como reconoce Font.