La Conselleria de Educación priorizará las rentas bajas en el acceso a un centro educativo. Esta es una de las principales novedades del borrador de decreto y orden de admisión que se debatirá hoy en mesa sectorial con los sindicatos y que entrará en vigor el próximo curso. Según la Conselleria de Educación, las dos principales mejoras para garantizar la equidad consisten en doblar la puntuación por el criterio de renta por unidad familiar, pasando de dos a cuatro puntos. De esta forma, se escala de una forma progresiva para dar más puntos a las familias con menos recursos.

Asimismo, modifican el sistema de sorteo para deshacer empates pensando en hacerlo más justo, optando por un sistema de doble letra en lugar de una sola tanto para el primer apellido como para el segundo.

Además, el beneficiario de la renta valenciana de inclusión se incorpora como supuesto de valoración específico a la hora de la obtención de un puesto escolar con cuatro puntos. Contará tanto para la valoración de solicitudes, en el apartado de renta familiar, como en caso de empate. Entre los 10 criterios que ordenan la admisión en un centro con más demanda que oferta, el tener esta renta ocupará el cuarto lugar por delante de la renta familiar. En cambio, los no nacidos no contarán como miembros de la unidad familiar a la hora de valorar los criterios de renta, familia numerosa o monoparental, eliminando su referencia en la norma, según la Conselleria.

Además, solo habrá un único programa lingüístico, que será el de educación plurilingüe e intercultural, desapareciendo la incorporación progresiva o de enseñanza en valenciano.

También se prioriza en el acceso a los menores en acogimiento residencial, familiar o guarda con fines de adopción.