Castelló es la octava capital de España en la que más ha subido el precio del alquiler de vivienda en el periodo que va del 2014 al 2019. Y es que ha crecido más de un 30%, un ritmo más propio de gran urbe, como Madrid, Barcelona, València o Málaga, que de una de tamaño mediano como la capital de la Plana.

Lo señala un informe reciente del Banco de España, realizado con datos de los portales más visitados --Idealista y Fotocasa-- que analiza la evolución del mercado de arrendamientos durante dicho periodo en las capitales de provincia, que apunta igualmente que, por ejemplo, en una ciudad cercana como el caso de Tarragona, este incremento ha sido de poco más del 15%. Alicante, que atrae muchos visitantes y con gran dinamismo inmobiliario, no llega ni al 30%.

El alto dinamismo del mercado castellonense, no solo en la capital, tiene como efecto, entre otros, el incremento en el número de empresas inmobiliarias, además de los problemas que genera la abultada demanda, que supera con creces a la oferta.

Por otra parte y en lo que se refiere a los precios medios por poblaciones, extraídos igualmente del portal de Idealista, en los municipios con mayor número de habitantes de la provincia oscilan entre los 5,16 euros por metro cuadrado de Vinaròs, y los 4,16 de Burriana, dejando a un lado a los más turísticos.

En este caso, Benicàssim presenta la renta promedio más elevada, con 8,9 €/m2, empujada al alza por los alquileres turísticos. Según la misma fuente, el valor más bajo es para Moncofa, entre las principales poblaciones.