Cerrar todos los centros de personas mayores para evitar la propagación del coronavirus entre este colectivo de riesgo. Esta es la orden que lanzó ayer jueves la Generalitat, según anunció el presidente, Ximo Puig, en su comparecencia en Les Corts. La medida afecta tanto a los siete centros de mayores de titularidad de la Conselleria que hay en la provincia como a las instalaciones de carácter municipal, como son los hogares de jubilados.

De este modo, el Gobierno autonómico dio ayer un paso más, después de que el Ayuntamiento de Castelló anunciara el miércoles la cancelación de todas las actividades que se realizaban en este tipo de instalaciones.

En esta misma línea, la de proteger a este colectivo vulnerable, residencias de mayores han prohibido las visitas para evitar la propagación del coronavirus entre estas personas de riesgo. Y es que el contagio masivo y paulatino de los usuarios de un centro de la localidad valenciana de Torrent ha puesto el foco en la necesidad de extremar los controles para evitar que el coronavirus se extienda en estos espacios.

sin visitas // Esta situación de alerta ha llevado a algunas residencias de la provincia a prohibir las visitas en sus instalaciones, mientras que otras las han limitado al máximo, según confirman desde la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la Comunitat (Aerte). «El protocolo del Ministerio apuesta por evitar las visitas de personas con posible sospecha o con alguna afección respiratoria, pero lo más recomendable es que vaya el menor número de personas posibles a estos centros, aunque sea complicado para los propios usuarios y para sus familiares», explica el presidente de Aerte, José María Toro, quien insiste en que «lo primero es proteger la salud de estas personas más vulnerables». «Cada residencia decide lo que cree más conveniente, por lo que pedimos comprensión y máxima colaboración», afirmó Toro al respecto.

Los protocolos son diversos. Una de las principales cadenas residenciales, con diversos asilos en la provincia, ha elaborado un decálogo en el que recomienda a los familiares que las visitas deben ser de 30 minutos a la semana con cita previa, «no besar» al usuario, no darle la mano ni tocarle, además de mantener una distancia mínima de dos metros.

No solo los centros privados están llevando a cabo este tipo de medidas, también los de titularidad pública. Por ejemplo, el Ayuntamiento de la Vall d’Uixó, ha recomendado a todas las familias de los usuarios del Hogar Sagrada Familia no realizar visitas y que los internos no salgan del geriátrico. Se trata de limitar los contactos al máximo.

La provincia de Castellón cuenta, en estos momentos, con una treintena de residencias con cerca de 3.000 plazas. Hay que tener en cuenta que los fallecimientos por la afección del coronavirus afectan, en gran medida, a personas mayores con patologías previas y de ahí la necesidad de insistir en la prevención.