La consellera de Sanidad, Ana Barceló, defendió el pasado jueves la decisión de alargar el cierre del ocio nocturno para frenar la expansión del coronavirus y evitó dar una fecha para reabrir los locales. Esta postura fue ayer amparada por la vicepresidenta y portavoz del Consell, Mónica Oltra, frente a las protestas del sector del ocio. Según Oltra, se trata de medidas de restricción que «en ningún caso son arbitrarias» y buscan proteger la salud de las personas.

Pero hay voces dentro del Consell que dudan de la eficacia de la medida. Este es el caso del secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, quien muestra su discrepancia ante la decisión de ampliar a 21 días más las «controvertidas» limitaciones a la hostelería en la Comunitat. «El problema no es la hostelería, ni los viajes ni el turismo», subraya Colomer, quien tampoco cree que lo sea el ocio reglado nocturno y diurno, que constituye un «dique de contención» frente al botellón descontrolado, que sí supondría un «gravísimo problema».

El responsable autonómico de Turismo reconoce que no le «duelen prendas» en mostrar su discrepancia. Colomer admite el «enorme» esfuerzo del sector turístico y el hostelero, que ha «hecho muy razonablemente sus deberes» y han protocolizado la seguridad, al tiempo que los defiende como un área económica especializada en «cuidar a las personas», subraya. Por ello, Colomer considera un «error» focalizar en este sector los problemas de la pandemia. S. R.