El pantano de Arenós es el más importante de la provincia de Castellón por su capacidad. En segundo lugar se sitúa el de Sitjar. Aumentar el caudal de agua embalsada es una de las principales reclamaciones de los regantes. De ahí que en los próximos meses vayan a licitar las obras para construir un nuevo aliviadero que permitirá aumentar la capacidad de la infraestructura hasta los 100 hectómetros cúbicos (hm3). En la práctica esto supone, según explica el presidente del Sindicat Central d’Aigües del Millars y vicepresidente segundo de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) en representación de los usuarios, Enrique Font, lograr tener reservas de agua para dos años y no solo para uno, como sucede hasta ahora, cuando el embalse se llena a causa de las lluvias o como consecuencia del deshielo.

Esta obra, cuyo presupuesto rondará los 12 millones de euros, permitirá dar un paso más para incrementar la capacidad de este embalse que está mermada prácticamente desde su construcción, hace cerca de 40 años. En este tiempo nunca ha podido albergar los 137 hectómetros cúbicos (hm3) para los que fue proyectado. El nivel habitual suele estar en los 70 hectómetros cúbicos.

sin plan global // De todos modos, este aliviadero no es la solución definitiva para resolver de forma estructural los problemas de seguridad que el pantano ha presentado desde su inauguración. Es una de las actuaciones del proyecto global que el Gobierno central, a través del Ministerio de Transición Ecológica, decidió desechar, como informó Mediterráneo.

El objetivo último del nuevo aliviadero es garantizar el rápido vaciado de la infraestructura si se producen fuertes precipitaciones y así lograr que el embalse pueda almacenar 100 hm3 de forma habitual y con total seguridad. De lograrse este propósito, sería posible pensar en proyectos hasta ahora pendientes, como el hecho de que el Millars tenga un caudal ecológico durante todo el año, es decir, que pudiera llevar agua hasta el paisaje protegido de la desembocadura del río, que transcurre por Vila-real, Burriana y Almassora.

Hay que resaltar que, actualmente, la presa de Arenós regula los caudales de la cuenca de cabecera del Millars y permite el regadío de más de 30.000 hectáreas de cultivos situados en la zona de la Plana.