Ana Barceló, la nueva consellera de Sanidad nombrada ayer por el president de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, va a recoger una herencia no precisamente fácil por parte de su predecesora. Y es que Carmen Montón viaja a Madrid para ser ministra con multitud de asuntos sin resolver en Castellón, dejando en la provincia un reguero de promesas incumplidas, carencias en los servicios sanitarios y procesos judiciales que no se han resuelto en favor de su departamento.

Un ejemplo de esto último son varias problemáticas que afectan al Hospital Provincial, en plena efervescencia esta semana después de que el lunes se conociera la sentencia que anula el acuerdo del Consejo de Gobierno del Consorcio Hospitalario de octubre del 2016 (más información en página 9) --un revés judicial que se suma al archivo por parte de la Fiscalía de la denuncia por irregularidades en facturas--. Los despidos y las readmisiones de trabajadores están por ver, así como la inclusión del centro en el sistema público valenciano de gestión, uno de los caballos de batalla de la anterior consellera.

Sin salir de la capital de la Plana, está pendiente todavía la ampliación del Hospital General, un proyecto que contempla un nuevo edificio de 1.400 m² de tres plantas, con una inversión cercana a los tres millones de euros. Entre otras ventajas, permitirá duplicar el espacio dedicado a Urgencias. A la espera de que se adjudique a alguna empresa, las previsiones marcan que el nuevo edificio esté listo en el 2021.

problemas en vinaròs // En el Hospital Comarcal de Vinaròs también tiene Ana Barceló mucho trabajo por hacer. La problemática más antigua se refiere a las listas de espera, de casi un año en alguna especialidad, consecuencia de la falta de personal en el centro. Para paliar esta situación, el Consell prometió la creación de 35 plazas de médicos, un refuerzo que no ha llegado.

La Vall d’Uixó tiene dos centros de salud, el I y el II, de la calle Octavi Ten y del barrio Carbonaire, que están pendientes de una actuación por parte de la Conselleria. El primero se amplia con un nuevo edificio, pendiente de obras. Sin embargo, un problema añadido ha surgido respecto a esta actuación, ya que en el centro de salud II apareció una gran grieta en su fachada, con lo que los pacientes han tenido que ser trasladados al I. El Consell ha licitado de urgencia las necesarias obras de acondicionamiento.

En Peñíscola, desde el equipo de gobierno se ha solicitado una solución a la falta de un especialista en Pediatría en el ambulatorio local, ya que la titular se encuentra de baja por maternidad y se ha cubierto la sustitución con una persona que es médico de familia. Esta petición se suma a otra que ya se lleva arrastrando varios años, como es el refuerzo en Pediatría en los meses de verano, ya que una sola persona puede asumir una población de 8.000 personas, pero no las 100.000 que hay durante los meses de verano, indicó la concejala de Sanidad, María Jesús Albiol.

En Els Ports, todavía está pendiente la puesta en marcha del SAMU 24 horas para Morella y Vilafranca, pese a que se aseguró que estaría funcionando antes del verano y a que es una actuación muy demandada.

Y también hay peticiones desde el Alto Palancia y el Alto Mijares, donde el PP denuncia que la Conselleria de Sanidad «abandona» estas comarcas al recortar la asistencia médica durante los meses de verano por no cubrir las vacantes que se generan.

un reto // Con estos mimbres, tras tomar posesión, la nueva consellera de Sanidad Universal y Salud Pública aseguró ayer que se va a «dejar la piel» en su nueva responsabilidad y que le «apasiona» el «importante reto». «Estoy orgullosa de formar parte de este Consell» y del proyecto del Botànic, indicó la consellera. Barceló señaló que, como es «muy pragmática», va a colocar a las personas en el centro de las políticas sanitarias. La consellera indicó que «por supuesto», espera la colaboración de Carmen Montón, y adelantó que le va a trasladar que «se acuerde» de las reivindicaciones de la Comunitat.