Un menú gastronómico inspirado en Ripollés. Excentricidad, vitalidad, optimismo, imaginación... Esta ha sido la apuesta de los alumnos del Máster de Gastronomía del CEU en su proyecto final, donde anoche presentaron exquisiteces de alta cocina a partir de los colores de los cuadros del genio, cuya colaboración desinteresada ha ido mucho más allá porque también ha diseñado sus chaquetillas.

En un ambiente que emulaba al artista, los futuros chefs estuvieron rodeados de obras de Ripollés que sirvieron de hilo conductor en esta original propuesta «para configurarla como una experiencia gastronómica», como la calificó Jordi Ferrer, director académico del campus.

Para Ripollés, esta iniciativa le ha dado «amplitud de miras» puesto que nunca le habían planteado «un reto de este calibre. En el fondo, todo es arte; la cocina es arte y arte con arte es una buena tortilla». El artista castellonense destacó «la armonía imaginativa de los alumnos con un ejercicio maravilloso de creatividad».

Tu paladar, nuestros colores

Tu paladar, nuestros colores es el nombre de esta propuesta conformada por un menú degustación de nueve platos que interpretan nueve obras del artista.

Una visión, además, «planetaria», porque son alumnos de Perú, Italia, Costa Rica, Colombia, Panamá, Egipto, Venezuela y España. Cada chef ha interpretado uno de esos cuadros. Por ejemplo, la obra Pareja se transformó en un tomate relleno de una espuma de tomate con vegetales y un crocante de arroz. Su autora fue la alumna de Costa Rica Priscila Rojas y destacó que «se puede ver que hay cherrys, arándanos, bayas, limas, limones, manos, vegetales y frutas en medio de una gran huerta».

La obra La Pajarita se convirtió en un pichón perdido en el huerto, creado por Jhon Gilbert, de Perú, quien vio «la combinación del mar y la montaña, albahaca, setas y alga kombu». El colombiano Alberto Vargas Aguilar interpretó el lienzo Metamorfosis partiendo de su voluntad de «contar la historia del pez» que ve representado «a partir de su universo cromático».

El jurado formado por profesionales del sector evaluaron el proyecto final. No se sabe aún la nota, pero estéticamente, la batalla estaba ganada.