El aeropuerto de Castellón no se ha escapado de la reprogramación de vuelos que está llevando a cabo Ryanair para hacer frente a los problemas de organización interna a consecuencia de la distribución de vacaciones de sus pilotos y las huelgas de controladores aéreos, lo que llevará a suprimir los dos vuelos previstos a Londres, algo que ya ocurrió el pasado domingo, con la cancelación de los dos enlaces a Brístol previstos para ese día.

ORGANIZACIÓN INTERNA // Ryanair suprimirá en total unos 2.100 vuelos entre esta semana y el próximo 28 de octubre para hacer frente a los problemas de organización interna, de los que 514 tienen origen o destino en España, una cuarta parte del total. Se trata, por tanto, de unas 12 cancelaciones de promedio al día en España y unas 85 semanales, según explican fuentes de la aerolínea irlandesa de bajo coste.

Pese a que en un principio la compañía señaló que las cancelaciones solo se darían en aquellos aeropuertos que absorben un importante volumen de tráfico, con el fin de dar alternativas in situ a los pasajeros, finalmente también ha afectado a los cuatro vuelos que esta semana estaba previsto que unieran Castellón con la capital británica y Brístol, cuyos viajeros no pudieron volar el pasado domingo desde y hacia tierras castellonenses, según confirmaron ayer fuentes de la propia compañía.