El director general de Recursos Humanos de la Conselleria de Sanidad, Justo Herrera, aseguró ayer que el proyecto integral para el Hospital Provincial es una «apuesta por el futuro» del centro y no por su «extinción ni desmantelamiento». Herrera explicó ante la comisión de Sanidad de Les Corts, a petición del PSPV, el proyecto integral para el centro. El exdirector económico, Miguel Llorens, citado por los 33 millones en facturas supuestamente irregulares, no compareció por «motivos de salud».

Según Herrera, en el 2017 la Conselleria destinará al centro un presupuesto de 60,5 millones y el Gobierno central 28 millones. A su juicio, mientras en el hospital haya dos entidades jurídicas (Consorcio y Conselleria) la integración deberá ser asistencial y no podrá haber movilidad de los profesionales, cuyos equipos deberán colaborar e intercambiar información, pero recordó que se crearán 109 plazas estructurales. Según Herrera, el Provincial está en una «situación excepcional», ya que no tiene población asignada, por lo que la financiación vía capitativa «es imposible» y el análisis de los ratios de plantilla, «complejo».

Era necesario «tomar medidas para salvarlo de la quiebra», por lo que Sanidad asumió la deuda de más de 30 millones que arrastraba, a su juicio, por «falta de planificación y de gestión».

El plan, según Herrera, conlleva poner orden e incluye importantes inversiones, como un edificio de referencia de atención oncológica, en un espacio paralizado por falta de licencia municipal y que iba a ser usado de aulario por una universidad privada.

PP: «ES SECTARIO» // Para Mercedes Yáñez (PP), la hoja de ruta de Sanidad es «bastante sectaria y dañina» y pretende hacer un «desmantelamiento ideológico del centro, por revanchismo político e ideología sectaria».

Ignacio Subías (PSPV) destacó que desde que en el 2004 fue autónomo «ha ido a su aire al no estar integrado en la Conselleria, lo que le ha llevado a no funcionar de la manera más eficiente posible» y tener infraestructuras paralizadas hace más de cinco años. Mònica Àlvaro (Compromís) destacó que con este plan se dejará al hospital, por primera vez, «dedicarse a lo que nunca había hecho, una mejora sustancial en la oncología» y subrayó la «valentía» del actual Consell al «plantarse ante el fraude de ley y conseguir estabilidad laboral».

Mercedes Ventura (Ciudadanos) indicó que «sigue faltando mucho personal, hay una larga lista de espera y han sido despedidos algunos especialistas muy necesarios». Daniel Geffner (Podemos) consideró que la gestión «ha sido opaca» y abogó por respetar los derechos laborales.